Ciencia y espiritualidad
A continuación encontrarás todos los post relacionados con Ciencia y Espiritualidad.
La generosidad como palanca de crecimiento
Este post lo he llamado “La generosidad como palanca de crecimiento”, porque quisiera apelar a la necesidad de dar y compartir la consciencia espiritual para experimentar el conocimiento. El conocimiento es aquel que es independiente del tiempo y de la manera en que percibimos en estados normales de conciencia. El conocimiento es lo que se enseña a través de las fuentes de sabiduría, y es aquello en lo que podemos confiar por representar la verdad más elevada de nosotros mismos. El conocimiento se experimenta, y es en esos términos en los que se expresan los testimonios de personas que finalmente dieron un salto en su nivel de experiencia hacia lo divino.
Este post es para aquellos que ya han tenido experiencias de lo espiritual y están convencidos de que hay algo más allá del mundo que vemos. Sin embargo, no consiguen experimentar el conocimiento, ni encontrar respuestas a determinados hechos de nuestro mundo, tales como la muerte fortuita de un ser querido, una violación, la traición de un familiar, la enfermedad de un niño, o tener que trabajar la mayor parte de nuestra vida para finalmente morir. Qué poco sentido tiene esto último ¿no?
Como decía, muchas veces nos vemos insatisfechos con las preguntas que nos hacemos a través de los ojos con los que miramos el mundo. No nos convencen y esto genera una duda interna. En realidad, cuando un cúmulo de situaciones no comprendemos y suceden en poco tiempo, podemos llegar a la conclusión de que la vida no tiene sentido, pero debemos recordar que es sólo una interpretación que estamos haciendo, carente de verdad.
La falta de un verdadero conocimiento que explique cómo son las cosas, va generando una incomodidad interna, un anhelo, y la duda acerca de cómo son las cosas va creciendo en nuestro interior. Cuando esto sucede, no son malas noticias, al contrario, es el alma llamando a la esencia del Ser que somos. Nos volvemos más sensibles al no saber dar respuestas certeras ante lo que nos encontramos, hasta llegar incluso a pasar por una etapa que se denomina «la noche oscura del alma». Ante esta misma tesitura me encontré un día, y llegué a la siguiente conclusión:
“Cómo hablar de confianza e ignorar lo que somos”
Hay determinados hechos e injusticias a la que no encontramos un sentido. Pero sí sabemos que determinadas personas, a través de determinadas experiencias de dolor y sufrimiento, han encontrado un nuevo sentido a la vida. Recordamos por ejemplo hace algo más de un año el caso de Pablo Ráez, quien dió a conocer su historia de lucha contra la leucemia, y que dió un sentido a su vida mediante concienciar a la sociedad de la necesidad de disponer de más donantes de médula ósea. Su historia fue inspiradora y todos nos vemos reflejados en él.
La confianza no nace desde un modelo de la realidad que no se auto – sustenta en todas las ocasiones. No podemos confiar en un sistema de pensamiento que a veces es verdad y a veces no. En este sentido, tampoco podemos confiar en nuestra percepción, pues como veremos más abajo, este no es más que la extensión de los pensamientos y no sirven para objetivar las situaciones.
El Ser humano no está separado entre las diferentes individualidades que lo conforman ni está separado del resto de la materia. Somos vida, y formamos una Unidad. Nuestra naturaleza es simplemente amar, de igual manera que la función de un romero es ser un romero, o un jazmín es ser un jazmín, no un romero. El Ser humano está hecho para dar y expandir el amor, pero primero es necesario purificar nuestros sentidos porque partimos de ver sólo cuerpos separados unos de otros. Por ello es necesario trabajar el perdón, para ir más allá de la percepción de los sentidos. Nuestra naturaleza es dar a los demás.
Cuando la mente es capaz de entender que no es un cuerpo, cuando cree firmemente que somos espíritu, y aprendemos que Dios sólo sabe dar, establecemos los ingredientes para la paz interior y la abundancia. Cuando nos sentimos abundantes, somos conscientes de que lo tenemos todo, y entonces nace en nosotros la caridad y la compasión por los demás. Pero antes de llegar a este punto, es necesario romper muchas barreras y resistencias que nuestro ego interpondrá para reconocer que nosotros también formamos parte de la vida, y que en nosotros está también la misma inteligencia organizadora de la naturaleza. La vida no nos pertenece, y es por esto mismo por lo que traemos con nosotros mismos todo lo necesario para el viaje terrenal.
Pero nos es muy difícil tener certeza sobre lo que no se ve, porque hay creencias del inconsciente colectivo que son necesarias liberar; el tan archiconocido “si no lo veo, no lo creo”, por ejemplo, o lo de que para llegar a Dios hay que ser pobre o depender del sacramento de la confesión, el cual se sustenta en la culpa.
Por su parte, la falta de estudios filosóficos y humanistas, especialmente en aquellos que estudiaron carreras de cortes científicos, como es mi caso, dificultan la aproximación a la Verdad. Un experimento de física cuántica que serviría para esto mismo es el principio de incertidumbre de Heinseberg, donde se explica también en este documental de física cuántica. La física cuántica es la parte de la ciencia que está empezando a conectar todo, incluyendo lo no visible, desde el análisis del mundo microscópico.
El acercamiento que especialmente hemos tenido en el mundo moderno hacia la espiritualidad, desde la infancia, fue en general a través de la iglesia católica, y esta, en general no aclara muchas de las interpretaciones del inconsciente colectivo, las cuales muchas de ellas carecían de sentido para la gente, y por ende, hay mucha gente agnóstica que no explora otros acercamientos de lo no visible.
Algunas lecciones que son necesarias rectificar es por ejemplo, la relación de la espiritualidad con el sufrimiento, las represalias de Dios, la pobreza, la culpa o el castigo. No es cierto por ejemplo que Dios pusiera a prueba a Adán y Eva con el árbol del conocimiento, o que fuimos expulsados del paraíso por comer del fruto del árbol prohibido. O que la salvación vino con la crucifixión, implicando la idea de la culpabilidad y el sufrimiento para llegar a Dios. Esto fue un acto del hombre ante su ignorancia, por eso Jesús decía aquello de “perdónalos señor, no saben lo que hacen”. Y a los cuarenta días y cuarenta noches, Dios resucitó a su hijo Jesús entre los muertos, por lo tanto, en la muerte del cuerpo, o la creencia de que somos el cuerpo, reside en realidad la salvación del hombre.
En el significado de la imagen que observamos en el Bhagavad Gita, también podemos ver reflejado lo expuesto:
Los caballos representan los sentidos del ser humano, mientras que las riendas son los pensamientos. El carro es el cuerpo. En él hay dos personajes, el ser individual, el ego, quien es conducido, y Krisna, el Ser Supremo de la sabiduría védica, Dios mismo, el que conduce. Si no permitimos ser conducidos por Dios, por la voz de la fuente que nos creó, esa voz que resuena en nuestra alma, daremos rienda suelta a los sentidos, pues nuestra mente es inquieta y cambiante. Dependemos del cochero, de la conexión de los pensamientos (las riendas) con Dios, para aplicar el discernimiento para asegurar la mejor ruta en la vida. Sin el guía que conduzca el carro, no existe discernimiento y vamos a la deriva a través de la mente.
Para poder separar lo verdadero de lo falso es necesario dejar las riendas de nuestra vida a la música que suena en nuestro corazón, y de esa manera, seremos conducidos por la divinidad. Viviremos conforme a la nuestra naturaleza que es espíritu, más allá del nacimiento, muerte, enfermedad y vejez, que es la visión fundamental que tiene nuestro estado normal de conciencia.
Vivimos identificados con nuestros pensamientos, sin saber que no somos nuestros pensamientos. Y a pesar de que existen algunos seres humanos lúcidos que viven consagrados a que el resto despertemos, nos cuesta mucho avanzar. Y parte de este problema es porque nos auto – limitamos, queriendo ver afuera todo el rato, al querer entender a través de los sentidos. Utilizando la descripción de la imagen anterior, es como conducir el carro por parte del ser individual, el ego. Por eso es necesario dedicarnos tiempo a nosotros mismos, para aquietar la mente, estudiar sabiduría y experimentar en el instante presente, lo que somos.
“La palabra fraguada en el silencio hace Diana en el ser”
Por muchos maestros espirituales que se sigan, si luego en el día a día no queremos aplicar los métodos que conocemos para poner a prueba lo que nos dicen, no conseguirás experimentar el conocimiento.
La ciencia nos dice que para que algo sea real esta debe ser independiente del sujeto que la percibe, pero la verdad es otra mucho más elevada, tal y cómo está demostrando cada vez más la física cuántica. A nivel microscópico, y como queda demostrado en el experimento de Heinseberg ya está demostrada que la realidad es intrínsecamente subjetiva. Como es arriba es abajo, como es adentro es afuera, esto significa que si a nivel microscópico esto es así, tiene que ser también así a nivel macro. Mi opinión es que todavía no estamos preparados para aceptarlo y por ello, no lo experimentamos en la práctica, porque la creencia de que estamos separados aún es dominante.
No estamos condenados a vivir en automático en función de lo que vemos. Podemos decidir qué queremos que suceda según que situaciones. Todo está dentro de nosotros. El mundo que percibimos es una proyección de lo que está dentro de nosotros, pero este cambio de chip es muy difícil de realizar, no porque sea difícil en sí, sino porque nuestro modelo acerca del mundo choca frontalmente con esta idea. Es como cuando en la antigüedad pensaban que el sol giraba alrededor de la tierra, o que las espinacas tienen un alto contenido en hierro.
Invertir el sistema de pensamiento no es algo que pueda hacerse de la noche a la mañana, salvo en determinadas excepciones en las que sucede un salto cuántico en la conciencia de una persona. Esto es lo que sucedió a determinados maestros tales como Eckhart Tolle o Wayne Dyer. Lo habitual es tener que hacer ese cambio mediante la transcendencia de multitud de creencias que nos han hecho sentirnos seguros en nuestra existencia, la existencia del tiempo, el propósito de la vida tal y cómo lo concebimos desde el Ego etc…
Ser valiente y embarcarse en una búsqueda que dé respuestas a estas preguntas no sólo tiene sentido sino que es nuestro deber, haciendo conocido lo desconocido.
Si supiéramos que siempre existimos, en la eternidad, en un presente eterno. Dónde recordáramos que soy el que decide la experiencia que quiero tener, y la experiencia en sí. Si el miedo fuera una pesadilla que sucedió en un rápido instante, y que no existe en el ahora. Si pudiéramos apreciar nuestra existencia como lo que es, un regalo de lo divino. Si pudieramos entender que el modo que tengo de conocerme es a través de los demás, y que sólo existen por así decirlo, dos acciones posibles, disfrutar y evolucionar a través del aprendizaje que me proporciona la experiencia en el instante presente. Si pudiéramos entender que todo aquel que no experimenta amor es una oportunidad de ver la luz que hay en él para que este se re-cree. Si tuviéramos claro que nuestra función es dar amor, de la misma manera que las plantas nos dan el oxígeno que respiramos, o el cielo el agua para la vida, sería posible parar esta epidemia de confusión, estrés, y desconexión con quienes somos realmente.
Todos somos hijos de la creación, y no hay nadie que sea más o menos que otro, somos lo mismo. Somos un único Ser y no estamos separados y estamos destinados a que brote el amor alrededor nuestro, como la vida brota en perfecta armonía en la naturaleza. Pero hay algo que los seres humanos podemos hacer frente a otros seres vivos, y es negar la realidad presente.
Con la mente dual, en el estado normal de conciencia, aparece lo que consideramos como bueno o malo, aparece el juicio, y esa es la manera de rechazar la realidad, la unidad donde todo está interconectado y todo es lo mismo. No hay diferencias.
No importa si la realidad tiene que ver con tristeza o dolor, no somos quienes para negar que suceda. Es la arrogancia del hombre la que se cree que puede ser selectivo con la realidad que le toca vivir. Lo único que hace la vida es invitarte a aprender para que puedas ser feliz, y esto es algo que nunca puedes perder.
Ciertamente, adentrarse en la espiritualidad supone un cambio en la forma de vivir de ciento ochenta grados, pero estamos juntos en esto, y cada vez somos más los que lo entendemos, y hacemos uso de nuestro poder para hacer un mundo más respetuoso con el medio ambiente, con los animales y con el prójimo, es decir, con toda la creación. Cuando mantenemos en nuestra mente la conciencia lo que es realmente la vida, un milagro y un regalo del Cielo, cuando vivimos en la presencia de Dios.
Nada que no entendamos desde la óptica de lo mundano, no puede explicarse porque no es real. Todos somos inocentes y nuestra salvación es ser descubrir la luz que somos para revelarla ante los demás. Mientras percibamos otra cosa que no sea luz en los demás, necesitamos seguir sanando, y la manera de hacerlo es purificando la percepción, con el perdón.
Somos amor, y quien no refleje eso que somos, está pidiendo amor, necesita reconocerse. Todo lo que podemos hacer es recordar lo que somos sirviendo de inspiración a través de nuestro ejemplo. Entonces, a estas alturas te pregunto:
¿Quieres llevar razón o quieres la paz?
¿Quieres llevar razón o quieres perdonar?
Perdonar no significa perdonar a otro. Perdonar es ver más allá de una interpretación. Es comprender el error que tenemos de sentirnos incompletos y separados, reconocerse uno mismo como lo que Es, y desarrollar la compasión por los demás. Es en este sentido por lo que con este post hago un -llamamiento especial a la generosidad-, ser generosos para ver la luz en los demás, y dejar de alimentar a la humanidad con pensamientos de culpa, castigo, odio y separación. En su lugar, responsabilidad, compasión, solidaridad, colaboración, logro, superación e inspiración.
Qué conocimiento nos permite comenzar a despertar
Habremos oído muchas veces que el ego es como un sistema de defensa que surge en las primeras etapas de nuestra vida.
En un momento dado de nuestra vida cuando estamos siendo nosotros mismos, podemos interpretar que no estamos encajando.
Ya sea en nuestra familia o en la escuela, comenzamos a respirar el miedo del inconsciente colectivo, y comenzamos a aprender que separarnos de quienes somos debe ser el precio a pagar por vivir en medio de la extensa sociedad.
En esa transición del Ser al mundo del ego, abandonamos nuestros sueños dominados por el miedo de que siendo nosotros mismos no será posible sobrevivir. El esfuerzo arduo en el día a día, el sacrificio y la seguridad son valores implícitos en la nueva meta más «realista», basada muchas veces en una profesión que desde el punto de vista de la familia sea una apuesta más certera.
En ese ambiente de competitividad, invertimos gran cantidad de energía representando un personaje, tal como, “el trabajador”, “el inteligente”, “el perseverante”, “el fuerte”, “el poderoso”… siempre tratando de esconder aquello de lo que creo que carezco, como un secreto que es necesario ocultar para que los demás nos quieran. Pero, ¿qué pasaría si eso sólo fuese una interpretación, una ilusión? ¿Podrías por un momento admitir que esto pudiera ser así?
Lo cierto es que acabamos tan poseídos por el mundo externo que salir de la «ilusión» llega a ser muy difícil, porque estamos muy identificados con nuestro personaje, con nuestra historia personal, por el pasado. En mi caso esto me llevó a una sensación de vacío con la que terminé concluyendo:
“mi vida así no tiene sentido, debe haber otra forma”
… y de ahí surgió una búsqueda inaplazable.
Ahora escribo esto con la esperanza de que mi historia pueda servirles de inspiración a otros…
El conocimiento, ese que proviene de fuentes de sabiduría, nos revelan que -no existe diferencia entre lo que pensamos acerca del mundo y como vemos el mundo-. No hay separación. El universo es solamente inclusivo.
Esto hace que si estamos identificados con nuestra historia personal, aunque deseemos cambiarla y la rechacemos, sigamos teniendo más de lo mismo. Y es que estamos tan distraídos con lo externo y tan dominados por el miedo que usamos nuestro poder para hundirnos a nosotros mismos, y esto sucede cuando confundimos lo que nos sucede como una causa ajena a nosotros. De esa manera el mundo externo termina por condicionar nuestra vida.
Sin embargo, eso no tiene por qué ser así si aprendemos quienes somos y saber qué podemos hacer con lo que somos. La causa del mundo externo proviene de nosotros, y en todo momento podemos recrear otra experiencia de la realidad si apostamos por esto: que lo que vivimos afuera proviene de nuestro mundo interno. Lo invisible está antes de lo visible, y lo que percibimos es el resultado de lo que estamos siendo.
Puede que lleve un tiempo aceptar la posibilidad de que lo que aquí cuento es cierto. Sólo eso es necesario para comenzar. Puede ser el comienzo de una búsqueda espiritual que nos llevará inevitablemente a reconocer que somos los creadores de nuestra vida, de que no existen los demás porque todo el tiempo es una relación con uno mismo. No necesitas entenderlo. No tienes que creer en ello. Tan solo predispone a experimentarlo, abriendo la atención a ello. Este es el gran secreto que os quería compartir, y os invito a que lo experimentes por vosotros mismos.
Como resumen, es necesario darnos cuenta de que debemos invertir la manera en como funcionamos. No existe diferencia entre lo que pensamos acerca del mundo y como vemos el mundo. Nuestra falta de claridad al respecto podría ser nuestra falta de conciencia acerca de lo que pensamos, la inconsciente en nosotros. Nuestra dificultad de despertar es similar a explicarle a un pez qué es el agua. No es posible despertar si no vas dentro de ti a buscar las respuestas. Si hay algo que no te gusta en tu vida, ve adentro de ti. Es cuestión de un instante desarrollar la confianza y comenzar a reconocer que tú eres el mismo Creador.
Vida después de la muerte
En este post la connotada científica Kübler-Ross confirma de que sí existe el más allá, de que efectivamente, hay vida después de la muerte.
Espero que os resulte interesante. Aquí os dejo el link
Científicos demuestran que el alma existe
En este post, nuevamente, dos científicos se atreven a hablar de que existe un más allá después de la muerte. Hablan de que el alma existe.
Espero que os resulte interesante. Aquí os dejo el link
Viajes espirituales con Ayahuasca para la resolución de problemas
En este post hablo sobre los viajes espirituales con Ayahuasca para la resolución de problemas.
La vida se rige por una serie de leyes espirituales, y una de estas es la Ley de causa y efecto.
Lo que percibimos en el mundo externo o mundo de las formas es el efecto de lo que está dentro de nosotros
En nuestro estado normal de conciencia, en nuestro día a día, no tenemos acceso a la información de nuestro inconsciente, y no es fácil aflorar su contenido.
La clave de la Ayahuasca es que permite la comprensión de los hechos que vivimos durante la toma gracias a los estados expandidos de consciencia, dónde el inconsciente se nos revela y podemos tener la claridad que estamos necesitando para saber qué decisiones son las que debo tomar para el buen camino en la vida.
Lo que nos suele suceder es sencillo. Al igual que sucedía cuando se pensaba que la tierra era plana, mantenemos la creencia de que nuestra realidad es independiente del sujeto que la percibe. Como se ha explicado, y como la física cuántica ya ha demostrado, -la realidad que percibimos no es independiente del sujeto que la percibe-.
Ignorar o no reconocer nuestro mundo interior nos impide encontrar la causa para cambiar la realidad que no nos gusta.
Como pensamos que lo único que existe es un mundo externo y que es independiente de nosotros, buscamos cambiar nuestra realidad ahí fuera. Esta falta de conocimiento nos lleva a ser ineficaces en nuestro buen caminar por la vida.
La Ayahuasca es uno de los Enteógenos que nos ofrece la posibilidad de experimentar la revelación de nuestro inconsciente, y comprobar la Ley de causa y efecto, y este será un valioso aprendizaje que podremos llevar a nuestro día a día para desenvolvernos mucho mejor.
Otra de las leyes espirituales es la Ley de correspondencia entre medios y fines, que es la que nos permite, junto con la Ley del desapego, aplicar la Ley de la atracción con las mejores garantías. Para llegar a manifestar aquello que queremos en nuestra vida, primero hay que ser y luego hacer. Puede parecer complicado su funcionamiento (Ley de la atracción), el tener que transformar nuestro Ser, dados los condicionamientos tan fuertes que tenemos con nuestro Ego.
Una de las claves que solemos pasar por alto para superar nuestros obstáculos es la aceptación de todas las emociones resentidas. Es la manera de transformar el Ser, y de que para conducirnos a un determinado objetivo podamos trascender los sentimientos limitantes por emociones positivas como la gratitud y vibrar en la abundancia.
La vida es aceptación, tanto de aquello que nos gusta como lo que no nos gusta. Cuando hay rechazo a sentir las emociones que nos corresponden para nuestro aprendizaje, la vida atrae las personas, situaciones y circunstancias, cada vez con mayor intensidad, para volver a sentirlas y transformarnos. Al igual que la naturaleza, el Ser humano también tiende a regenerarse, y así es como funciona.
“Todo lo que nos sucede es un reflejo de cómo nos sentimos por dentro, es un reflejo de nuestro inconsciente.”
La Ayahuasca también puede ayudarnos en este cometido, nos pone en contacto con experiencias que permitan soltar las emociones resentidas, y nos libera de su esclavitud.
El rechazo puede ser consciente o inconsciente, y es la principal motivación que tiene el ego. Cuando tomamos Ayahuasca podemos ver más allá de las experiencias que nos producen rechazo, y trascender de esta manera las limitaciones, pudiendo empezar a disfrutar en las situaciones o ambientes causantes de nuestra neurosis.
Llegados a este punto, uno puede empezar a intuir que la diferencia entre sentirnos muy desgraciados o considerar la vida como algo mágico con un funcionamiento perfecto, según nuestro nivel de conocimiento sobre lo-que-realmente-somos.
Desde esta perspectiva, aquello que calificamos como malo puede que no tenga nada de malo.
Sea por lo que sea, en la actualidad, no son los sabios los que están al mando de enseñarnos como es que tenemos que vivir.
Con este post recordamos que el mundo que percibimos es una proyección de nuestro mundo interior. También, que la manera de transformarnos y eliminar los obstáculos para llegar a los sueños es aplicando la Ley de la atracción, y en la regeneración del Ser, aceptar las emociones, sin poner resistencia. De esta manera, podremos resolver los problemas más fácilmente, al buscar las causas de los mismos en el lugar adecuado, -nuestro interior-, y encaminar nuestra vida mucho mejor aplicando la no – resistencia y el desapego.
Psilocibina en la mejora de la depresión
En este post se habla sobre investigación de la psilocibina en la mejora de la depresión en pacientes diagnosticados de cáncer en fase avanzada.
Y es que el estado psicológico es determinante en la superación de determinadas enfermedades tan graves como el cáncer.
Aquí os dejo el link.
Si deseáis profundizar en la influencia del estado del «alma» sobre la salud de una persona, podéis también consultar el siguiente post.
Investigación sobre Ayahuasca
En este post hablo sobre la necesidad de investigación sobre Ayahuasca para la sanación del Ser.
Hoy en día la Ayahuasca, o Yagé, como también es conocido por los pueblos indígenas de la selva amazónica, está empezando a ser muy popular, y esto es debido al extraordinario potencial terapéutico que muchas personas que lo han probado han podido experimentar, entre las que me incluyo.
En la actualidad existen determinadas patologías como la depresión o la adicción a la cocaína sin un tratamiento efectivo para su cura; sin embargo, tal y como se desprende de la entrevista realizada a Jordi Riba, a través de ciertos psicodélicos como la Ayahuasca, se reconocen casos de curación que hace que merezca la pena su investigación de la mano de la medicina occidental.
En su entrevista también se menciona el caso de personas que padecen estrés postraumático, como excombatientes de los EE.UU. en Afganistán o Irak, a quienes hasta nada les había funcionada hasta ese momento.
Jordi Riba es un farmacólogo catalán y referente mundial en la investigación de la Ayahuasca, y acaba de ser incluido por la revista norteamericana Rolling Stone en la lista de las 25 personas más influyentes en el futuro de la ciencia. Pero la Ayahuasca también puede estar indicada para enfermedades mucho más comunes que afectan hoy en día a millones de personas en todo el mundo, como el estrés o la ansiedad. Según la OMS, -el estrés, la ansiedad, junto con la depresión constituyen ya el 12 % del total de enfermedades mundiales-, siendo más significativas en las ciudades y países más avanzados a consecuencia del estilo de vida acelerado. Según la OMS, entre un 35 y un 50% de las personas que padecen alguno de estos trastornos no han sido diagnosticados ni tratados.
La Ayahuasca es un Enteógeno que actúa con inteligencia, a un nivel holístico, viendo todas las dimensiones al Ser humano, incluida la dimensión espiritual. Por su parte, la medicina tradicional presta atención especialmente a la dimensión física, pero la psique del Ser humano lleva implícitos otros misterios que sólo pueden ser abordados desde una perspectiva más amplia acerca de lo que Somos.
Muchos más problemas de salud de lo que pensamos vienen originados por nuestra forma de pensar y de vivir, en especial en el mundo occidental, donde a pesar de contar con más y mejores medios y comodidades somos más infelices.
En lo referente a la mente, aquellas enfermedades que surgen de la manera de pensar, solo pueden ser resueltas por la persona que la padece, que es quien mejor puede conocer lo que sucede. Sin embargo, pero quién no se sabe esclavo de su propia mente, difícilmente puede curarse, y ahí es dónde la Ayahuasca puede jugar un papel crucial en su sanación. Además, cuando un problema de esta naturaleza persiste en el tiempo, pueden surgir secuelas en la persona que dificultan más la recuperación.
Cuando a través de ansiolíticos y otros fármacos, o en general, anulamos nuestro sentir, con el tiempo, podemos desconectarnos de nuestras emociones, que son la guía para restituir pensamiento del Ser, que es la permite un pensamiento sano para la persona.
Es el pensamiento que es propio de la persona y por tanto está más alineado con su naturaleza particular. Habrá casos en que pueda ser conveniente el consumo de estos fármacos, prescritos por un médico, pero hoy en día es alarmante el número de casos en que no está para nada justificado, y crean más perjuicios a largo plazo de lo que nos pensamos. Escuchar lo que nuestro Ser nos trata de decir con las emociones que sentimos, constituye una salida temprana y eficaz para resolver este tipo de patologías, pero la falta de tiempo y consciencia espiritual no ayudan en este cometido. Conocerse a sí mismo y reconocer todas las dimensiones de la naturaleza humana, incluida la espiritual, es fundamental para el buen caminar.
La forma en como construimos el pensamiento puede estar condicionado por experiencias y emociones que se provocaron con determinadas personas, ambientes o situaciones en nuestra vida, que limitan nuestra atención; desde perspectivas, por ejemplo, de miedo o inseguridad, hasta simplemente no seguir nuestra guía interna para permitir nuestra realización personal. Dichas experiencias o ambientes en nuestra vida se denominan improntas, y se caracterizan por la gran intensidad con que se forjaron en nuestra mente. Ser consciente de estas improntas, es conocernos a nosotros mismos, y aceptarlas, es el primer paso para restituir el pensamiento de nuestro verdadero Ser, que nos lleva a la senda de la salud y el bienestar en nuestra vida.
Afortunadamente, aunque no es posible cambiar las cosas que nos sucedieron en la vida, si es posible cambiar el significado que le dimos a las cosas que nos suceden en la vida, es decir, podemos cambiar la percepción que tenemos de las mismas. Sin embargo, de la misma manera que por ejemplo los ansiolíticos guardan su sentido en determinados casos para permitir el inicio de la recuperación de la persona por sí sola, la Ayahuasca también puede ser la solución para determinados casos como los mencionados anteriormente de adicciones muy avanzadas, o el estrés postraumático.
No pueden descartarse soluciones que son determinantes en la curación de determinadas patologías que a día de hoy no tienen solución en la medicina occidental. En mi opinión, la Ayahuasca, a través de los estados expandidos de conciencia, es capaz de generar experiencias suficientemente intensas como para producir el cambio de percepción clave, en forma de nuevo aprendizaje que dote a la persona de un nuevo sentido.
En general, la eficacia de lo que se persigue al tomar Ayahuasca es mayor cuanto mayor es la predisposición y apertura al cambio, y la coherencia mantenida con lo aprendido a posteriori. Sucede que, si bien tras tomar Ayahuasca, sus beneficios se ven extendidos en los días y semanas posteriores, la química asociada al anterior sistema de pensamiento trata de restablecerse, y si esto sucede, la persona puede tener una recaída. En mi opinión, una fase de preparación y seguimiento posterior completaría el proceso, por los especialistas indicados en relación a la patología del paciente.
Existen muchos prejuicios y opiniones al respecto de la Ayahuasca porque el mismo se encasilla en la familia de las drogas alucinógenas. Esto no es así, y para ello, exponemos la aclaración del Doctor D. Germán Zuluaga en su libro “El aprendizaje de las plantas en la senda de un conocimiento olvidado”:
“La ingestión ritual de las plantas psicotrópicas en las comunidades indígenas va dirigida a producir un trance que podemos diferenciar de la simple alucinación por varias razones: el trance tiene coherencia interna, no hay pérdida de las relaciones espacio-temporales ni pérdida de la conciencia y está dirigido y controlado por un especialista mediante técnicas de gran complejidad: cantos, danzas, plantas complementarios. Sin embargo, la esencia fundamental del trance es su intención, puesto que se busca con un fin específico que, la mayoría de las veces, es terapéutico. Para obtener este efecto, es preciso cumplir una estricta preparación y consumos y consumir plantas dentro del marco ritual y sagrado que durante miles de años ha respetado el indígena.”
Don Germán Zuluaga es hoy día una de las principales personalidades de la medicina en relación a la Ayahuasca. Es de origen Colombiano, y es autor de varios libros y artículos científicos relacionados la botánica médica.
Desde mi experiencia, tomar Ayahuasca es como entrar a un quirófano para sanar nuestro sistema de pensamiento. El doctor en este caso es nuestra conciencia expandida, siendo la Ayahuasca la responsable dicha expansión de nuestra conciencia, así como de la purga de todo aquello que no pertenece a un cuerpo en su estado óptimo de salud. Como se comenta en el libro de Germán Zuluaga:
“…yagé tiene la capacidad de discernir dónde está el problema, para limpiar precisamente el órgano afectado”
Hoy en día tomar Ayahuasca está al alcance de la mano de cualquiera que desee tomarla. La Ayahuasca ha llegado a Occidente para quedarse, y hay muchas personas que ya han podido conocer sus bondades terapéuticas. Sin embargo, si bien hay mucha información en internet, la que hay a nivel científico es escasa, o al menos no es suficiente para tomar la decisión de acceder a la experiencia con Ayahuasca con un mínimo de criterio. Menos aún con quién tomarla, y dónde tomarla, dada la información tan contradictoria existente en internet. Con esta tesitura, y tras algunas experiencias previas en España, decidí viajar por Sudamérica para coger una mayor perspectiva al respecto. La realidad es que no resulta fácil encontrar auténticos chamanes consagrados a la sanación con la Ayahuasca. La popularidad de la Ayahuasca ha incrementado el surgimiento de nuevos facilitadores de Ayahuasca, que no necesariamente son chamanes. En mi opinión, no necesariamente hacen un peor trabajo, no puede prejuzgarse.
El problema puede venir asociado precisamente con las contraindicaciones que puede tener la Ayahuasca para determinadas personas. La ignorancia de estos factores unido a la búsqueda de hacer negocio por encima de otras cuestiones, es lo que puede conllevar riesgos la toma de Ayahuasca para determinadas personas que por ejemplo se encuentren tomando algún tipo de medicamento o padezcan algún tipo de trastorno psíquico, que puede ser incluso desconocido para la propia persona.
Otra de las observaciones que pude realizar durante mi viaje por la región Amazónica es que se está perdiendo gran parte de la sabiduría de los ancestros indígenas, incluyendo el manejo de la botánica. Las nuevas generaciones se abocan a las tentaciones del mundo moderno, abandonando sus costumbres y tradiciones, al tiempo que las comunidades indígenas se vuelven cada vez más dependientes del mundo civilizado, en muchas ocasiones, forzados por la menor disponibilidad de recursos que la tierra les ofrece por su progresiva degradación. Afortunadamente, a este tipo de nuevas realidades, surgen iniciativas como earthealers, que tiene como cometido poder informar y organizar una llamada a la acción para oner de manifiesto y divulgar aquellos espacios de nuestra tierra que .
Es imperativo y una responsabilidad también de los países occidentales que se conserve el legado de sabiduría de los ancestros indígenas, ya que son los pueblos de la humanidad que han permanecido en contacto con la tierra y cuyas culturas tienen su origen miles de años atrás. Su cosmovisión puede ser determinante algún día para restaurar el equilibrio dentro de nuestra propia naturaleza y a reequilibrar las necesidades del entorno natural.
Es imperativo y una responsabilidad también de los países occidentales que se conserve el legado de sabiduría ancestral de los indígenas, ya que son los pueblos de la humanidad que han permanecido en contacto con la tierra y cuyas culturas tienen su origen miles de años atrás. El estado de la naturaleza es un reflejo del estado del Ser Humano, y su cosmovisión puede ser determinante algún día para restaurar nuestro propio equilibrio como especie.
Aunque nuestra conciencia actual no nos permite creerlo, el Ser Humano está ligado a la naturaleza.
Para concluir, la Ayahuasca es una medicina milenaria que se ha abierto desde la Selva Amazónica al mundo occidental, y que se ha hecho más popular hoy día que ninguna otra sustancia psicodélica, y esto no es por casualidad. Incrementar los recursos para la investigación de la Ayahuasca, en aras a reducir los riesgos para las personas y explorar su potencial terapéutico debería ser un objetivo prioritario, así como el establecimiento de puentes interculturales con los pueblos indígenas, reconociendo su papel fundamental, no sólo en la investigación de sus medicinas milenarias, sino también en la preservación de la paz y la salud de nuestra especie.
Si deseas ampliar más acerca de cómo la Ayahuasca no puede ayudar en la resolución de problemas, puedes continuar viendo este post.
La Ayahuasca no es una droga y tiene efectos beneficiosos
La ayahuasca no es una droga y tiene efectos beneficiosos como el mismo Jordi Riba indica en su entrevista.
Lo que en la entrevista se cuenta, es un hito en la historia científica de España. En él se prueba como la Ayahuasca tiene efectos muy beneficiosos para la salud psicológica, y como puede convertirse en un medio para llegar allá donde otros fármacos no llegan, por ejemplo, a la hora de curar la ansiedad, la depresión o incluso el estrés postraumático. Así mismo, describe grandes descubrimientos por parte de la liana Ayahuasca. Según Jordi Riba:
«Una cosa que hemos hallado recientemente es que los compuestos de la liana, que se creía que únicamente ayudaban a que la DMT no se degradara, tienen unos efectos biológicos bastante interesantes. En el cerebro adulto de los mamíferos, hay una serie de nichos de células madre que producen nuevas neuronas. A este fenómeno no se le ha prestado demasiada atención porque el ritmo de producción es francamente bajo. Ahora, nosotros hemos visto que dos de los compuestos que están presentes en la liana, las beta-carbolinas, tienen unos efectos neurogénicos muy potentes.»
Espero que este artículo sirva para comenzar a tener un acercamiento con mayor respeto hacia estas medicinas que vienen siendo usadas por los indígenas durante miles de años. Aquí dejo el link.
Lo que debes saber sobre la Ley de atracción
La Ley de atracción nos dice que atraemos aquello en lo que pensamos, y no lo que deseamos necesariamente. Somos energía vibratoria que atrae aquello que se corresponden con ese mismo nivel vibratorio. Todo aquello que rechazamos, también lo atraemos, porque rechazar es pensar en eso que quieres rechazar. Como decía Carl Jung:
“A lo que te resistes, persiste”
Según la Física Cuántica, -el pensamiento es la arquitectura de la realidad que percibimos-; la realidad no es independiente del sujeto que la percibe. Como persona de ciencia y ligada a la investigación, este hecho me produce un profundo descanso, pues ya queda justificado soñar mejor y resulta más fácil intencionar nuestra experiencia como deseemos. Como ya decía mi estimable amigo Wayne Dyer:
“Cuando uno cambia su forma de contemplar las cosas, las cosas que contempla cambian”
Pero solemos funcionar de una forma muy distinta, desde nuestro ego (o mente desconectada del espíritu). Desde el ego, partimos de una perspectiva de temor e inseguridad, y por tanto, en lugar de ver un mundo abundante de posibilidades para nosotros, nos enfocamos en rechazar, controlar y en defendernos, y esos pensamientos atraen situaciones que no queremos con tanta intensidad y rapidez como crece nuestra obsesión sobre ellas. También sucede que la falta de confianza automáticamente nos hace centrarnos más en la ausencia del deseo, aquello que todavía no tenemos, y por tanto, interferimos en la manifestación. Este es uno de los principales formas de boicotear la Ley de la atracción.
Debemos darnos cuenta de que la Vida está sujeta a la Ley del cambio, y que siempre tendremos deseos sin cumplir. Esto nunca acaba porque siempre estamos deseando. Cuando conseguimos algo, surgen siempre nuevos deseos. Nuestra naturaleza es creativa. Por tanto, -debemos aceptar como parte del juego de la vida que siempre tendremos deseos por cumplirse-.
Con la ley de atracción soportada por la Física Cuántica, entramos en un nuevo paradigma acerca de la realidad. Podemos hacer un ejercicio consciente para decidir qué queremos ver, y por tanto, conducir el pensamiento hacia eso, y esto requiere un uso responsable y más exquisito de nuestro lenguaje, de acuerdo a cómo funcionan las Leyes del Universo. A través de nuestro lenguaje podemos rechazar cosas con la intención de evitarlas, pero eso ya hemos visto que no funciona. Debemos incorporar el conocimiento de la Ley de la Atracción para utilizar el lenguaje para los fines que pretendemos. Como decía Ludwig Wittgenstein:
«Los límites de mi lenguaje son los límites de mi mundo»
La mayoría de las ocasiones cogemos frases populares que no pensamos por nosotros mismos, y condicionan nuestra vida. Aquí tenemos unos ejemplos que limitan nuestros sueños:
«Lo semejante atrae lo semejante»
Aplicar la Ley de la atracción con mejores garantías requiere dejar de funcionar desde nuestro ego y funcionar desde nuestro Ser, dónde nuestra mente se conecta con nuestro espíritu, y surge -El Guía Interior-. Con la mente conectada con el espíritu, será posible asumir que la Vida es abundancia, y que somos dignos de recibir todo aquellos que deseemos. Una vez pongamos en marcha el proceso de atracción, podremos estar en el presente, con confianza en que recibiremos todo aquello que necesitemos. La actitud de apertura al Ser debe primar en todo momento.
Una vez ponemos en marcha la Ley de atracción, -podemos comenzar por aquello más insignificante-, y a medida que la apliquemos conscientemente, observando lo que pensamos, lo que sentimos, y viendo cómo surge todo aquello que deseamos, aprenderemos más sobre ella y crecerá la confianza. Es muy importante recordar que debemos ver todo el proceso, de principio a fin, hasta que se manifieste aquello que creamos en la mente en primer lugar:
La tendencia es a pensar que las cosas suceden por casualidad, pero no es así-. Podemos ir afinando nuestra conciencia de control sobre nuestra realidad si mantenemos presente todo el proceso de Pensamiento-Emoción-Acción, hasta la manifestación en el plano físico, de lo no físico (nuestros pensamientos).